El nombre de ese chiquitin es Bogo y es un pandita que vive en la China. Bogo tiene hambre todo el tiempo y por eso hay que picarle en "more" (que significa bamboo en chino) para darle de comer. Bogo es muy taviesillo y jugueton, como todos los pandas que se precian de serlo.
Un día Bogo estaba en la selva (o donde sea que viven los pandas) y escuchó un fuerte rugido. Era un leon...
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2 comentarios:
Bogo chiquito y todo no era tonto, sabía que era un león por el Discovery y sabía que en donde vivía, el Asia eterna, no había leones sino tigres. A lo mejor, pensó, es el tigre fanfarrón, que cansado de su casi-no-suena-cuando-rugo anda de alumno del perico extranjero ese que a todo mundo imita.
Bogo, chiquito y todo, no era tonto pero ah como comía. Comer me ayuda a pensar, decía, además soy el simbolo de la Madre China y nadie quiere simbolos imperialistas flacos y desdichados (Bogo había visto algún programa sobre la anorexia en las pasarelas de París).
Así estaba Bogo, comiendo, comiendo y pensando, pensando, cuando volvió a escuchar, esta vez casi a la vuelta (la vuelta de algún lado), el rugido del león...
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